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August 2, 2012

“The Mirror of Yoga” y Consejo de Gregor Maehle.~ Toni Romero {Artículo en Español}

Photo by Flickr user Beverly & Pack.

El mes próximo es un tiempo complejo para los que padece ansiedad.

Agosto puede ser muy caluroso en algunas partes del mundo, especialmente aquí en España. La temperatura altera la condición de la gunas y el flujo del prana. Es mucho más fácil que la mente y el cuerpo se sienta más tamas y rajas, es decir apagado cansado o excitado. Al ser ansiedad de por si rajas con matices de tamas, influye mucho. Es como tener un coche que se calienta el motor muy rápido y además hace calor, entonces lo mejor es todo lo que enfríe el sistema para que pueda funcionar con normalidad.

Por eso mi propósito, a partir de una pequeña teoría desarrollada, es enumerar una sería de consejos y remedios útiles. Hace unas semanas leyendo “The Mirror of Yoga” entendí que la ansiedad se produce en el proceso apánico de la exhalación. El cerebro lo asocia a las ideas de impermanencia, cambio y muerte. Eso dispara el mecanismo de la imaginación y los pensamientos irracionales que empieza a moverse rápidamente para estimular todo el organismo provocando diferentes reacciones físicas. Entre ellas una inhalación forzada y entrecortada, la mala calidad de la inhalación no balancea con la exhalación, lo que finaliza en una respiración irregular (hiperventilación). Todo eso aunque tiene un principia apánico el exceso de inhalación puede convertirse en un factor pránico, sobrenergizante y también productor de calor, sobreestimulante y hasta agravante del nadi solar.

Todo ese ciclo se retroalimenta hasta que un factor rompe ese proceso y vuelve a balancearse la respiración interna. En muchos casos ese tipo de calor excitante puede aumentar ese círculo de malestar. Por eso el frío es realmente favorable. Ducharse con agua complemente de esa temperatura, refresca todo el sistema nervioso, calma, relaja la mente. Después de una buena ducha fría es ideal la práctica de pranayama, meditación vispassana y personalmente hasta la práctica de ashtanga. En teoría sería mejor algo caliente para que los músculos ya entraran con más facilidad, pero el factor psicológico produce más flexibilidad y control físico. Por lo tanto si para llegar a ese estado de tranquilidad es mejor agua fría, no hay problema , con los surya namaskara el músculo vuelve a estirarse.

Photo by Flickr user Athens Yoga.

Alguien podría pensar, entonces Ashatanga es malo para un ansioso, porque produce mucho calor. Efectivamente el fuego interno que origina es intenso, sudas eliminas muchas cosas, pero hay tipo y tipos de calor. El que crea el Ashantanga llamado “tapas” limpia internamente los músculos y órganos, en cierto modo expulsas la angustia con el sudor. Muchas emociones asociadas a la ansiedad se quedan bloqueadas en la piel y el cuerpo interno.

La clave principal se encuentra en el trabajo conjunto de los ocho pasos de Pantajali. El ritmo respiratorio balancea la inhalación y exhalación lo que produce que el cerebro no caiga en el descontrol de la ansiedad. Asana limpia los canales internos, piel carne músculo. Pratyahara lleva la atención controlando los sentidos y en ese punto es donde se detiene el flujo de las emociones y permites los tres últimos, concentración, meditación y eventualmente samadhi nos reconectan con la permanencia inherente de nuestra existencia real y escapan a las trampas del ego.

Volviendo al tema del Pranayama, hace un tiempo tuve la posibilidad de preguntarle a Gregor Maehle via web (quién hace poco ha publicado un magnífico libro sobre Pranayama) qué tipo de respiración era aconsejable para trabajar el control sobre los ataque de pánico. Muy amablemente me contestó que la apuesta más segura era nadi sodhana con un ratio 1:2. Explico que ansiedad era rajas, por lo tanto exhalar el doble de tiempo era la forma adecuada.

Por mi experiencia puedo añadir que sitali también es beneficiosa al tener efecto calmante y refrescante. Siempre sin kumbhaka, una persona que aún no tiene una buena toma de conciencia del proceso de ansiedad, las retenciones pueden incrementar mucho las sensaciones desagradables. Así que resumiendo: Ashtanga, nadi sodhana y duchas de agua fría son algunas buenas armas para estas semanas de tanto calor.

Toni es un apasionado poeta y yoghi, amante de la literatura, filosofía y curioso de las diferentes religiones del mundo y mitología. Maneja cinco idiomas y ha recitado poesía desde la adolescencia. Recientemente publicó su primer libro “Habitaciones sin Sueño” el cual es una colección de poemas de los pasados siete años de su vida. Su único y apasionado estilo te da una entrada a las dimensiones más profundas del sentimiento humano. Actualmente vive en España donde practica meditación de Vipassana y Ashtanga Yoga. Para saber más de Toni puedes seguir en Facebook, donde comparte sus experiencias y realizaciones que fluyen con la práctica.

 

 

~Editora: Jeannie Page.

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